Una disciplina con la que ejercitamos cuerpo y mente trabajando y uniendo en cada clase, el dinamismo y la fuerza muscular con el control mental, la respiración y la relajación.
La respiración y el control y consciencia sobre la misma. Cada ejercicio cuenta con su propio patrón respiratorio, siempre entendiéndolo como un proceso natural y no forzado.
El principio más conocido, Joseph Pilates decía que hay que hacer énfasis en los músculos estabilizadores profundos (suelo pélvico, transverso, multífidos y diafragma) para minimizar las fuerzas sobre la columna.
Creado para organizar la columna en su orientación óptima, implica la alineación correcta de la cabeza, la columna vertebral y la pelvis, estirando la columna en su eje axial, que atraviesa nuestro cuerpo de arriba a abajo.
Uno de los objetivos de este método es el control del cuerpo, buscando un equilibrio entre los músculos para desaparezcan las tensiones.
En la concentración debemos conectar mente y cuerpo, debemos activar nuestro sistema sensorial para reconocer nuestras sensaciones.
La razón por la que necesitas conectar tu mente con tu cuerpo es porque permite controlar cualquier aspecto en cualquier momento.
En Pilates, siempre nos movemos con fluidez de una posición a otra, el final de un movimiento es el inicio de otro, las posiciones estáticas no son paradas, sino que son alargamientos o movimientos que se prolongan.
El Pilates o método Pilates es un sistema de entrenamiento creado por Joseph Pilates (Alemania 1.880-1.967). Joseph tuvo una infancia marcada por la debilidad física debido a raquitismo, fiebres reumáticas y asma, durante su juventud practicó muchas disciplinas para combatir estas dolencias. También tuvo especial relevancia el hecho de que su padre fuese gimnasta y su madre naturista. Durante la primera Guerra Mundial fue internado en campos de concentración en Inglaterra, donde hizo labores de enfermero para los prisioneros, fue entonces cuando comenzó a concebir un sistema de ejercicios que más tardes llamaría “Contrología”.
Tras la guerra volvió a Alemania y profundizó en sus conocimientos de holística, meditación, danza moderna, homeopatía y respiración. En 1.926 emigró a EE.UU. y en 1.930 él y su mujer ya eran dueños de su propio estudio, en 1.940 esta técnica había ganado popularidad entre los bailarines de la ciudad. Tras muchos años de trabajo publica: “Su Salud” (1.934) y “Volver a la Vida” (1.967), muere a los 87 años dejando un gran legado.